Junta de Educación está suspendida, hay una provisional y los sétimos años arrancaron sin profesores.

Con una junta provisional, otra suspendida y sin profesores en el arranque del curso para los sétimos años, así inició lecciones en el 2024 el Liceo de Coronado, un centro educativo que en los últimos tiempos, por una u otra razón, ha estado en el ojo de la tormenta.

Este colegio ha tenido siete directores en los últimos seis meses y en los últimos años han entrado y salido una gran cantidad de personas de su Junta de Educación, lo que en parte refleja la inestabilidad que se vive en este centro educativo.

Actualmente al frente de la Junta está Amadeo Calderón, ya pensionado y que durante muchos años fue director de la escuela José Ana Marín. Él fue nombrado junto a dos miembros más, en forma provisional, por el Concejo Municipal, luego que este ente suspendiera al presidente y dos personas de la junta, por supuesta mala administración e incumplimiento de deberes, lo que habría provocado dificultades operativas al Liceo, en el cierre del 2023.

La decisión del Concejo se basó en la presentación que les hizo Ileana Arce, supervisora del circuito, en la sesión del 18 de diciembre pasado, cuando manifestó su preocupación por “algunas situaciones irregulares” del presidente de la Junta, José Quesada,  que habrían sido avaladas por dos compañeras en esa agrupación, Karol Fernández y María González, y entre las cuales se señaló el hecho de que Quesada no había realizado el debido proceso para sustituir a la contadora de dicha agrupación, no se había aprobado el presupuesto, había problemas con el precio de los uniformes y que no se habría renovado el contrato con las cocineras, a las que en ese entonces supuestamente ni siquiera les habían pagado el aguinaldo.

El pasado 19 de febrero, en la sesión ordinaria del Concejo Municipal, se atendió a representantes del Ministerio de Educación (MEP) que llegaron a detallar la situación de este colegio, en compañía de la supervisora Arce.  

Paula Víquez, de servicios administrativos del MEP, aclaró, en dicha sesión, que el tema en este caso “no es malversación de fondos sino la falta de actuar del presidente de la Junta, y nosotros tenemos plazos establecidos para muchos procesos, y el señor Jorge Quesada no actuaba conforme sus funciones que le correspondía por reglamento. Un ejemplo claro es la presentación del presupuesto ordinario por el cual trabajan las juntas y que no confeccionó junto con la Junta en ese momento. Tenemos pruebas de que ni siquiera podía reunirse”.

La suspensión de los tres miembros sería hasta marzo, mes en el cual supuestamente se les vence el periodo quedando en poder del Concejo elegir una nueva junta.

Por su parte, el nuevo director del Liceo, Jorge Calderón, expresó en la sesión del 19, que es fundamental que la labor de la dirección y de las juntas vayan amalgamadas, para pagar en tiempo y forma rubros como comida, transporte, limpieza, mantenimiento, etc.

“Una junta administrativa que no actúe de manera responsable va a provocar a corto o mediano plazo que el colegio se cierre. Recordemos que hay más de 400 instituciones que tienen órdenes sanitarias en todo el país, producto de una mala administración”.

Calderón afirmó que encontró un colegio con una infraestructura que cada día se está deteriorando más, y un recurso didáctico y tecnológico inexistente; dijo que quiere darle énfasis a la mediación pedagógica. Afirmó que este colegio pasó de ser una dirección tres, de más de mil estudiantes a dos, y señaló que podría llegar a uno e incluso al cierre si no se toman las medidas correctivas necesarias.

“Este colegio requiere una intervención profesional, porque si no va a ser una bomba de tiempo”, dijo Calderón.

Los nuevos

La junta provisional asumió desde el 26 de diciembre y hasta el 26 de marzo. Amadeo afirmó que se ha encontrado problemas serios, pero de orden, y que “nuestro propósito es sacar el colegio adelante y marcar el norte para quienes lleguen después”. Agregó que “encontramos una infraestructura pésima, proyectos que al menos yo no estoy conforme pero que ya estaban hechos, y nos hemos dado a la tarea a tratar de limpiarle un poquito la cara al colegio”.

Calderón manifestó que en estos tres meses el propósito ha sido primero organizar toda la parte presupuestaria, que vaya de la mano con la planificación, pagar las deudas que había y que por “malos contratos elaborados” estaban a punto de denuncias, y sobre todo resolver el recibimiento de los estudiantes, ya que cuando asumieron estaban en vacaciones.

Uno de los asuntos que esta nueva Junta resolvió fue el de los uniformes, cuyo costo estaba como en ¢12.500 la camisa, y aunque Amadeo considera que es válido que las juntas de educación hagan actividades para lograr fondos propios, porque los gobiernos de turno han reducido en un 75% los presupuestos a los centros educativos, considera que en el caso de los uniformes le pareció que la junta anterior “se complicó la vida queriendo ganar más sobre lo que ya es caro para los estudiantes, y lo mejor fue cobrar precio de costo y evitarle complicaciones a la junta, y que fuese el proveedor quien se encargue de todo”, y así lo hicieron.  

Amadeo ya le presentó un informe a la supervisión de cómo encontró el colegio, y dice que cuando termine el periodo que les dieron hará otro de cómo lo dejan, con las recomendaciones de qué es lo que tienen que hacer para que el colegio siga un norte.

Amadeo Calderón, actual presidente provisional de la Junta de Educación del Liceo de Coronado, ha trabajado en ordenar el desorden administrativo que se encontró.

A las autoridades del Liceo, les preocupa y lamentan que la institución haya perdido credibilidad en la comunidad.

Sin clases

Por otra parte, al cierre de edición padres de familia nos llamaron para denunciar que prácticamente en las dos primeras semanas, los sétimos años no tuvieron clases normales porque el MEP no ha hecho los respectivos nombramientos de profesores.

Se hizo la consulta a prensa del MEP, donde nos confirmaron esta situación y nos dijeron que iban a darnos una versión del departamento de Recursos Humanos, pero al cierre de edición no había llegado tal.

FOTO DE ARCHIVO

La falta de profesores ha provocado que los sétimos años no hayan tenido clases normales en las dos primeras semanas lectivas.